...en nuestra Viblia
Portada del libro RIAÑO VIVE. 1987 |
Como cualquier religión que se precie de serlo sus ideas se nutren de la memoria heredada o la memoria escrita sobre las hojas de un libro. Nosotros hemos descubierto casi sin saberlo, que también tenemos el nuestro aunque no somos una religión(eso creo). Se trata de la del libro publicado en 1987, editado por Enrique Martínez Fidalgo y titulado:
RIAÑO VIVE (nuestra Viblia). De lo mejor creemos, que se ha editado sobre la Montaña de Riaño.
En este libro se encuentra escrita de forma rigurosa y clara un resumen de los muchos valores que atesoró la historia y cultura de nuestra tierra montañesa, además de un alegato por su conservación, que fue el motivo de su lanzamiento. Todo ello hecho por un grupo se ilustres personas. Sensibles al desastre del pantano que entonces se avecinaba y comprometidos en la lucha por LA RAZON, por encima de intereses egoistas.
Entre sus textos queremos resaltar hoy por su oportunidad el apartado titulado:
RIAÑO SIN PANTANO, UNA MIRADA ESPERANZADA AL FUTURO un repaso riguroso de los pasos a dar en una "hipotética" recuperación del Valle de Riaño. Todo, dentro del trabajo:
PROSPERIDAD Y PAISAJE EN RIAÑO, UNA ALTERNATIVA OPTIMISTA
Un informe riguroso realizado por Antonio Gómez Sal y Manuel Rodríguez Pascual, con su experiencia y desde la sensatez del sentido común; que puede sorprender a muchos por su actualidad. Hoy, es perfectamente coherente tanto en sus predicciones (que por desgracia se han cumplido) como en su apuesta por un cambio en el modelo de desarrollo rural en nuestro país, en especial nuestra montaña; que hoy sigue sin realizarse.
Si queréis bajaros el libro completo en formato pdf, pulsa aquí.
Para los que nacimos durante o después del atentado estatal al valle leonés, ese libro ha sido una de nuestras principales fuentes de información.
ResponderEliminarEn mi caso, cuando leí el libro empecé a cambiar la forma de mirar a esas montañas.
Riaño vive al menos en el recuerdo de este Blog. Laciana está a punto de desaparecer cubierta por una nube de polvo, procedente de las explotaciones a cielo abierto. Las aguas de Riaño no sabemos hacia donde caminan y cuantas mentiras inundan. El carbón de Laciana corre hacia bolsillos que no conocemos, lejos de este lugar. Acá solo queda desolación y enfermos. ¡unamos nuestras fuerzas! al menos la de este ex-minero en Villablino
ResponderEliminarriosil, gracias por tu grito en estre sitio.
ResponderEliminarNosotros solo hacemos lo que nos manda nuestro instinto y emociones por lo que hemos vivido en nuestra niñez y primera juventud en esta tierra de Riaño. Así lo haremos el tiempo que nos de el aliento y aconsejamos a todo el mundo que lo haga, si lo siente por dentro, como se siente una arcada pero en el alma.
No dejes de hacerlo y cuando te caiga el desánimo,...espera y descansa.
UnAbrazo